DESARROLLANDO LA MENTE LÓGICO-MATEMÁTICA: LAS MATEMÁTICAS Y EL CÁLCULO CON MONTESSORI (PARTE II)

Hacía mucho que quería escribir este post. De hecho, ya empecé con la introducción al área lógico-matemática con este post de aquí, pero Marco va creciendo y sus aprendizajes se van desarrollando y acomplejando mientras pasa de “nivel” a su ritmo. 

Las actividades relacionadas con las pre-matemáticas tienen que ver, principalmente, con actividades de vida práctica. Y es que para Maria Montessori, las matemáticas no están solo en los cálculos y los números, sino que aparecen constantemente en la vida cotidiana. En efecto, llenar un vaso de agua exige precisión y exactitud. Maria Montessori hablaba del «espíritu matemático». No hay que entenderlo como el lado frío de las matemáticas, sino como la organización ordenada de informaciones precisas y exactas indispensables para nuestro desarrollo.

Al igual que os conté con el enfoque montessoriano del lenguaje (tenéis el post aquí), los aprendizajes matemáticos se hacen sin libros de texto, aunque sí se utilizan unos materiales concretos, notables en su progresión. 

Con los trabajos de vida práctica de la pedagogía Montessori (servirse el agua, doblar calcetines, cocinar…), el niño aprende, desde los 2-2 años y medio, a concentrarse, a reflexionar, a asociar su mirada y su gesto, a organizar su espacio vital y su trabajo él solo, a encadenar secuencias de acciones necesarias para obtener un resultado… que le permiten abordar sin esfuerzo ciertas nociones matemáticas, de manera concreta e intuitiva. 

En esta pedagogía, y siguiendo los fundamentos de la neurociencia, es a partir de los 4 años, cuando se introduce el cálculo y las matemáticas propiamente dichas, apoyadas en los conocimientos adquiridos por impregnación, en geometría (formas, volúmenes…), en aritmética (suma, multiplicación, fracciones…), en lenguaje (más grande, más pequeño…). 

Obviamente, no vamos a introducir directamente al niño en la abstracción de las matemáticas, sino a continuar, a partir de lo concreto, un proceso progresivo, utilizando cada vez nuevos materiales adaptados y específicos para cada concepto matemático.

Así pues, hoy os enseñamos lo que hemos hecho en nuestra primera fase introductoria y que sigue al post que os he enlazado más arriba. También os pongo el orden en el que se presentan los materiales y los conceptos que los acompañan. Es cierto que con el peque empezamos un poquito antes de lo que propone la pedagogía pero como siempre digo, las edades son orientativas y es totalmente normal (y es como debe ser) que un niño antes de los tres años no conozca los números o las letras. También es cierto que no se trata de una cronología lineal, pues ciertas etapas son paralelas y ciertos materiales se utilizan varias veces en diferentes momentos, para diversos aprendizajes. 

Os dejamos, pues, los diferentes materiales y propuestas que se realizan en los ambientes Montessori y que hemos realizado en casa con materiales totalmente DIY.  Estos primeros materiales Montessori para las matemáticas ayudan al niño a sentirse a gusto con los números del 1 al 10, a establecer los vínculos entre número oral y cantidad, número oral y símbolo escrito y, después, símbolo escrito y cantidad. Estas relaciones son los fundamentos indispensables para una comprensión sólida del número.

Primera Fase: descubrir y aprender las cantidades

Los listones rojos y azules 

El número es un concepto abstracto, pues es a la vez cantidad, cifra escrita y nombre oral. Los listones rojos y azules consiguen materializar esta abstracción. Además, permiten al niño aprender verdaderamente a contar, es decir, no a recitar mecánicamente los números: uno, dos, tres, cuatro… sino a percibir las cantidades en su «tamaño», su «grandeza» con relación a las demás. Es el primer material matemático que se presenta al niño que ya ha trabajado con el material sensorial de los listones rojos, cuando es capaz de construir una escalera y, en consecuencia, de percibir la seriación.

En casa hemos fabricado nosotros mismos el material y lo hemos simplificado, puesto que el listón más grande debe medir un metro de largo. Las actividades que hemos realizado siguen los tiempos Montessori: presentar los listones y su nombre, identificar los listones y contar secciones, ordenar listones (de mayor a menor y viceversa), identificar listones (por orden y de manera aleatoria)… siempre contando con el factor autocorrectivo (en este caso, el listón uno es la guía para comprobar si la secuenciación es correcta).

Segunda Fase: descubrir y aprender los símbolos

Las cifras rugosas 

Esta es la llave que abre al niño de corta edad el mundo de las cifras escritas. El material consta de 10 tarjetas con los símbolos rugosos (al igual que las letras de lija). Las nuestras también son DIY. Algo a remarcar, es que por el momento, el niño no debe trabajar con el 0. 

Las actividades relacionadas se definen por presentar grupos de tres símbolos, y no necesariamente por orden (es importante que sean símbolos que no se parezcan, por ejemplo, el 1-6-3, 2-5-7, 4-8-9, ya que en el enfoque Montessori se trabaja a partir del contraste y no de la memorización cronológica) para que el peque se familiarice con el símbolo, mediante el trazo con el dedo, o como hemos hecho nosotros, repasar con plastelina el número. La presentación se hace según la lección en 3 tiempos y el objetivo no es aprender el orden de las cifras sino los símbolos por sí mismos.

A parte de presentar las cifras propiamente, podemos empezar a trabajar con la bandeja de preescritura, puesto que esta fase es contemporánea al trabajo de las letras rugosas. 

Tercera fase: asociar las cantidades con los símbolos

Asociación de las barras numéricas con los símbolos 

En este momento, el niño ya ha recibido una preparación acerca de las cantidades, por un lado, y de los símbolos, por otro. En esta fase se construye la relación entre las cantidades y los símbolos gracias a la contabilización que, en esta etapa, domina. 

El material de esta última fase puede ser muy diverso y es aquí donde podemos realizar actividades con material propiamente Montessori o actividades Montessori Friendly. La primera actividad que hemos realizado, y siguiendo el orden que se propone desde la pedagogía Montessori, es trabajar con las barras numéricas y una serie de números del 1 al 9, que bien pueden ser los números móviles o etiquetas pequeñas de cartulina y establecer la relación entre ellos.  

El trabajo que se realiza con estas actividades es el siguiente: nombrar las cantidades representadas en las tarjetas/números móbiles, relacionar cantidad con barra roja y azul (por orden y de manera aleatoria), impresión de la suma (crear un número a partir de otros dos)…

Otras actividades:

– Encontrar la cifra correcta.

– Jardín de números.

– Contar elementos: pueden ser elementos naturales (específicos de la estación), como hemos hecho nosotros, o incluso usar la mesa de luz para usar el asombro.

– Juego de emparejar cantidad y símbolo. 

Los husos

Como ya sabéis, una persona no tiene concepción de lo abstracto hasta los 10-12 años aproximadamente. Y las matemáticas son eso, abstracciones. Pero Montessori logró materializar estas abstracciones, y un ejemplo de ello es la caja de husos.

Con este material el niño descubre por primera vez que las cantidades separadas corresponden a un símbolo. Es también una herramienta esencial para reforzar la secuencia de los números en la mente del niño. Al tratarse de un material grande, para su manipulación, el niño se ve obligado a contar y a recontar, con mucha concentración. 

El material se puede hacer en casa, tal y cómo hemos hecho nosotros. Se compone de 45 palitos de madera (los nuestros son cañas de bambú) y dos bandejas de clasificación con 5 compartimentos cada una. Los compartimentos están numerados del 0 al 9. También podemos usar los compartimentos para clasificar todo tipo de elementos.

Su uso es muy sencillo: la presentación se hace según la lección en 3 tiempos (presentar su uso, identificación y manipulación). La belleza de este material es que tiene su propio control de error. Si sobra algún huso es que hay algún compartimiento que no tiene su cantidad bien adjudicada. 

Finalmente, con este material se interioriza el concepto del número cero. Es el último múmero en enseñar y con la caja de husos, se tiene el primer contacto: simplemente se presenta el número, como se ha hecho con los demás: “este número se llama cero. Así se escribe el número cero”. Se repite el nombre del número 4 o 5 veces. Después se indica que para el cero no hay husos: “El cero significa nada, así que no ponemos ningún huso en el apartado del cero”. 

Para Marco fue un descubrimiento ver que cero era nada. La verdad es que es maravilloso ver cómo descubren por si solos todo aquello que les rodea.

Las fichas

A medida que avanzamos en el aprendizaje y manipulación de los números, símbolos y cantidades, los materiales se sofistican y se materializan. Las fichas son un material compuesto por 55 fichas idénticas y planas ordenadas en un cestillo o una caja con tapa. Van acompañadas de las etiquetas del 1 al 10 que nos han servido para las barras numéricas y nosotros, también las hemos trabajado con los números móviles. 

Su uso es sencillo: instalar las etiquetas o números en orden, contar en voz alta y colocar las fichas debajo de su etiqueta de la forma indicada (puesto que esta disposición nos servirá un poco más adelante para trabajar otro concepto matemático). 

Como véis, la caja de husos o las fichas con los números móviles son una forma preciosa, no de memorizar los números, no, sino de entenderlos, de tocarlos, de sentirlos y aprenderlos. Que es así cómo se aprende: ¡poniendo nuestros sentidos en funcionamiento! Estos materiales son un auténtico tesoro que como sociedad hemos tenido la suerte de «heredar». 

Para acabar, una pequeña reflexión, y es que siempre digo que si me hubieran enseñado las matemáticas como las muestran en los ambientes Montessori no las hubiera odiado nunca, las hubiera amado. Recuerdo la primera vez que hice un curso Montessori, cuando aprendí sobre las presentaciones de matemáticas. Son una delicia de materiales, por donde puedes mover tus manos, tocar las matemáticas, sentirlas, vivirlas.

Tocar las matemáticas. Con las manos, con todos los sentidos. Y pensé: ¿Cómo pueden ser tan bonitas? ¿Por qué me he estado perdiendo algo tan hermoso todo este tiempo? Y al mismo tiempo sentí tristeza de pensar que lo que yo había vivido lo están viviendo otros pequeños.

Porque sí hay otra forma de aprender matemáticas. Que no es ni a través de una pizarra colgada en la pared llena de números, divisiones, multiplicaciones. Que no es a través de cuadernillos ni de sentir presión continua y hacer las cosas por obligación. Hay una forma hermosa que transforma todo eso que conocemos como abstracto e intangible en algo concreto y tangible.

Como contar. Contar es algo que a las personas mayores nos parece muy sencillo y que, muchas veces, pretendemos que nuestras criaturas aprendan los números sin tocarlos ni comprenderlos. Cuentan de memoria como si fuera una canción que hay que repetir de carrerilla. Pero ¿de qué se compone un número? ¿Os lo habéis cuestionado alguna vez? ¿Y si se lo explicamos a nuestros retoños y alumnos tocando estos números? 

Los números no se aprenden de memoria. Algo tan abstracto tiene que pasar por todos los sentidos. Algo tan bello debe pasar por un cambio de paradigma para que no pierda la belleza.

RITUALES DE CUMPLEAÑOS

¡Hola a tod@s!

Mañana Marco cumple cuatro años. Cuatro años. ¡Madre mía!

Así que me parecía de lo más bonito dedicar un post entero a explicaros cómo estamos preparando la llegada de los 4 años del peque. Cada vez es más consciente de todo, y nuestro objetivo es conseguir que viva las cosas así: de manera consciente, presente e intensa; disfrutando del proceso y no de la meta, siendo parte activa de todo y sobre todo de aquello que le incumbe, en este caso que va a cumplir cuatro años. 

Lo de que hayan pasado ya cuatro años desde que nuestra vida cambió por completo lo dejo si eso para otro post…

Ya en navidades nos dimos cuenta de que seguir el calendario de adviento lo situaba mucho en el tiempo. Ya sabéis que el paso del tiempo es algo muy abstracto y que a los niños les cuesta mucho de entender, ya que ellos viven el presente, el aquí y ahora. Cuando hacemos un calendario de este tipo, convertimos en físico algo abstracto y puede ayudar mucho a que ellos entiendan lo que falta para aquello que desean.

Y él hace mucho que habla de su aniversario, de que primero va el de su tía y después el suyo, y detrás el de su abuelo. Pero nos dimos cuenta que cuando nos preguntaba cuándo sería su cumpleaños la respuesta se quedaba corta. Es verdad que él se sitúa bastante bien a través de las estaciones, y sobre todo con la ayuda de la mesa de estación, pero claro, decirle en otoño que su cumple sería cuando hiciéramos la mesa de invierno, y que llegara el 21 de diciembre, hiciéramos la mesa de invierno y allí no pasara nada, dejaba el asunto un poco difuso. 

Así que este año nos hemos decidido a hacer una Espiral del tiempo inspirado en la pedagogía Waldorf para esperar la llegada de su cumple. La hemos hecho muy sencilla, sólo con cinco velas, para que no se le hiciera eterna la espera y pudiese contar bien.

Marco ha encendido cada día una vela. Lo hemos hecho por las tardes, que es cuando estamos en casa, y hemos dejado que se funda, entendiendo así que ese día ya ha terminado y es un día menos para que llegue su cumpleaños. Todo este ritual también esconde muchos aprendizajes detrás como la destreza, la paciencia y la concentración o ejercicios matemáticos para contar cuántas velas ya se han fundido y cuántas quedan.

La espiral la hicimos nosotros, bueno, el peque, con un poco de arcilla blanca, y la decoramos con colores de invierno (principalmente purpurina azul). 

Es algo muy sencillo pero que sin duda llena de ilusión la espera de algo especial para ellos. 

Esta noche, antes de acostarnos, leeremos el poema de cumpleaños (también de la pedagogía Waldorf) y explicaremos historietas de su vida. 

Y mañana por la mañana, se encontrará con su camino de color (huellas de distintas formas: corazones, estrellas, pies…) que lo llevará a la mesa de cumpleaños, donde su ropa para ese día “se habrá transformado mágicamente” en una corona y una capa de cumpleaños. Es su gran día y ese día ellos son los reyes.

Y recibirá tantos besos como años hace, tal y como indica el poema. 

En las celebraciones de cumpleaños de Marco también hemos decidido hacer la “celebración de la vida”, tal y como lo propuso María Montessori. Es un concepto que está muy relacionado con el anillo de cumpleaños de la pedagogía Waldorf, y es la parte hermosa y emotiva de la fiesta. Una fiesta que engloba un concepto más holístico que implica un proceso global (no solo cumplir años), la vida, que debe tener en cuenta todo el proceso vivido por el peque desde el momento en el que se inició su vida (el embarazo) hasta el momento actual.

En este post de aquí os explico mejor de qué se trata este ritual, cómo hemos hecho la corona y la capa.  

Mañana estaremos poco conectados en redes, disfrutando del peque y de sus precisos cuatro años. 

Un abrazo 

12-01-2021, EL DÍA QUE EMPECÉ DE NUEVO

Por fin he vuelto a escribir. La verdad es que ha sido, posiblemente, el año más duro de mi vida. Y no tanto por la pandemia, que también, sino porque se han juntado un conjunto de cosas… 

Posiblemente, este también sea el post que más me haya costado escribir. Pues hablar de lo que hacemos, de los juegos, de las propuestas, de las salidas, o incluso de decoración, es fácil. Pero mirar hacia dentro, a veces, cuesta.

Así que intentaré ponerme al día. Repasar un poco todos los ámbitos de mi vida y así poder dar rienda suelta al BLOG, que por cierto, lo recuperamos los viernes, puesto que así cerramos la semana de trabajo y porque de miércoles a viernes tengo más horas para poder dedicarme a escribir :).  

Mi 2020 empezó cuando decidí matricularme para ir a hacer las oposiciones para el profesorado. Sabía que no era mi año: poco tiempo trabajado, un peque de casi 3 años, poca experiencia y mucho, mucho trabajo por empezar. Pero lo hice. Y de hecho, he llegado hasta el final. Porque todo terminó hace un par de días… Así que mi último año ha rondado en torno a estudiar y preparar programaciones. Y aunque me ha costado sangre, sudor y lágrimas, he aprendido mucho. Y he crecido como persona. He descubierto nuevas maneras de enseñar, las he podido llevar a cabo, he disfrutado incluso un poquito estudiando… y me he llevado alguna que otra cana de más. 

Y en verano, cuando estaba en el punto máximo de trabajo y después de un inesperado confinamiento, empecé a reflexionar sobre las redes sociales. Supongo que en estos momentos trascendentales, te cuestionas una montaña de cosas. Y durante el confinamiento vi cosas que no me gustaban, que no me aportaban nada positivo. Y me agobié. Así que después de mucho reflexionar, decidí “limpiar” un poco mis redes. Yo no quería privatizarlas, porque me gusta que todo el mundo pueda ver lo que escribo, lo que hacemos, pero tampoco quería que fuese un canal para el chismorreo pueblerino. Yo no estoy en una carrera donde mi hijo o yo misma, tenemos que ser los mejores, o los primeros o los que más Montessori hacemos. Ni tampoco quiero que nadie se sienta atacado. Así que simplemente, aparté de mi perfil a otros perfiles negativos. Y así ni verlos ni que me vieran. 

Una de las primeras reglas, para mí, de las RRSS, es que si hay un perfil que no te interesa o que no te aporta es importante saber dejarlo estar. No pasa nada si es alguien conocido o alguien muy próximo. No debemos tener todos los mismos intereses, eso es lo que nos hace genuinos. Ni todos hacer lo mismo a la misma vez. Para mí, el mayor pecado es entrar en el fluir establecido por la sociedad. 

En fin, que hice un buen lavado de mis redes. Un lavado que volveré a realizar estos días, posiblemente cambiando nombre de usuario, enfoque de las fotografías… ya iréis viendo poco a poco

Espero que sigáis conmigo los que sintáis que mi contenido os interesa. Y si no, no pasa nada. Tampoco quiero entrar en una carrera por conseguir seguidores de donde no los hay. 

Yo seguiré creando contenido. El que me gusta. En el que creo. Siguiendo pedagogías alternativas, principalmente Montessori, respetuosas, manipulativas. Y sobretodo, pedagogías y metodologías sobre las que he leído, profundizado y contrastado. Porque no todo lo manipulativo es Montessori, por ejemplo, o no todo lo “manipulativo” es científico o profundo. 

Y crearé el contenido desde el punto de vista de la pedagogía Montessori que más me gusta: educar para la paz. Educar a mi hijo, a la sociedad. Porque, como ya he dicho, esto, para mí, no es una guerra, ni una competición. Simplemente es una decisión de familia, en la que creemos plenamente y llevamos a cabo con amor y dedicación, lejos de la tradicional mentalidad de ganar-perder, muy instaurada en la sociedad. Porque aunque no nos demos cuenta, vivimos en una sociedad intoxicada por esta creencia, donde priman las comparaciones, el chismorreo y las envidias. Nada parecido a la filosofía de las pedagogías que practicamos en casa. 

Y en relación a esta reflexión, hay una cita de María Montessori extraída del libro “El niño, el secreto de la infancia”, que me encanta: 

El adulto erróneamente imagina que puede realizar desde fuera un trabajo creativo, estimulando, ofreciendo directrices y sugerencias, a fin de que en el niño se desarrollen la inteligencia, el sentimiento y la voluntad. Crearé al hombre a mi imagen y semejanza. La soberbia fue el primer pecado del ser humano. 

Y después de un verano intenso, conseguí el trabajo perfecto, cerca de casa, por las mañanas. Donde podía combinar un poco el estudio y la dedicación con mi hijo. 

Pero el Covid llegó a casa. Y otra vez a estar aislados, a estar expuestos al chismorreo pueblerino, al bajón con las RRSS, a querer cambiar cosas de la vida propia… otro viaje personal que nos cambió. Nos hizo diferentes. Nos hizo transitarlo de diferentes maneras, cada uno a la suya (y ojo, no tuvimos síntomas prácticamente, pero la presión social fue máxima) y nos hizo priorizar. Relativizar. Excluir de nuestras vidas aquello realmente tóxico. 

Y pasar de todo. O de casi todo y centrarnos en nosotros mismos. En el aquí, en el ahora. 

Y con las oposiciones terminadas, mi prioridad es mi pequeño. Y mi marido y mi perrito. Estar con ellos el máximo tiempo posible. Jugando, descansando, leyendo o aprendiendo. Sí, porque no solo se aprende en la escuela. Recuerdo cuando empezamos, que algunas familias me decían que los niños tenían que ir al cole siempre. Primero porque ocupábamos una plaza que quizá alguien deseaba con fervor y segundo, porque así los niños y niñas socializan. Para mí, la socialización son los padres, sobre todo en la primera infancia. Y la magia del aprendizaje ocurre en casa. 

Como muchos ya sabréis, nunca he estado del todo convencida con la elección que hicimos con el cole de Marco. Pero por muchos factores, era la única opción. Y lidiar con un sistema más tradicional que alternativo y activo me está costando lo suyo. Y muchas reflexiones y posiciones. 

Y en esas andamos. Quizá me he obsesionado en una única forma de aprender. O de tratar a las personas. Pero de momento, no concibo el mundo desde otra perspectiva. Y seguiré luchando por lo que creo. Como siempre. Siguiendo la tópica frase de “el simple aleteo de una mariposa puede cambiar el mundo”. 

¡Nos vemos el viernes que viene!

DESARROLLANDO LA MENTE LÓGICO-MATEMÀTICA (I)

Después de un parón en el blog volvemos para intentar mantenerlo vivo. En verano siempre bajamos ritmos y este año más, que tengo que estudiar un poquito y las horas son las que son… pero escribir por este canal me relaja, me desafía y me motiva a la par. 

Así que hoy os he preparado un post cortito pero, para mí, altamente precioso. María Montessori estaba convencida de que los niños tienen una mente matemática, una capacidad para organizar, clasificar, formar series y cuantificar sus experiencias. Desde muy temprano, y si han estado en un ambiente Montessori, tienen un abanico de percepciones matemáticas que han adquirido a través de la la vida cotidiana: hacer recetas, trasvasar, mover objetos, observar las formas de las cosas, sus colores… 

Y a medida que van creciendo, los adultos podemos prepararles ambientes donde puedan desarrollar y afinar estas percepciones mediante diferentes actividades, todas ellas de recorrido sensorial. 

IMG_4694

A Marco le gustan las “matemáticas”. Siente atracción por las unidades, por las series, por las medidas, por los pesos, por los colores, por los contrarios, por las parejas… y yo me siento orgullosa porque creo que haberlo hecho crecer en un ambiente Montessori ha hecho que las entienda como una disciplina bonita. Siempre digo que si me hubieran enseñado las matemáticas como las muestran en los ambientes Montessori no las hubiera odiado nunca, sino todo lo contrario, las hubiera amado.

Tocar las matemáticas, sentirlas con las manos y todos los sentidos las convierte en una de las disciplinas más hermosas del mundo. Las presentaciones de matemáticas en los ambientes Montessori son una delícia. Los materiales son tan atractivos que devienen un canto silencioso a la concentración, una invitación tierna a explorar un mundo desconocido.

En casa ya hemos usado algunos de ellos y os aseguro que sí hay otra forma de aprender matemáticas. Que no es ni a través de una pizarra enorme colgada en la pared llena de raíces cuadradas, divisiones, multiplicaciones. Que no es a través de cuadernillos ni de sentir presión continua y hacer las cosas por obligación. Hay una forma hermosa que transforma todo eso que conocemos como abstracto e intangible en algo concreto y tangible.

IMG_4686

Es una forma preciosa, no de memorizar los números, no, sino de entenderlos, de tocarlos, de sentirlos y aprenderlos. Que es así cómo se aprende: poniendo nuestros sentidos en funcionamiento. Proporcionando al niño material manipulable que le permitirá vivir de manera palpable nuevos conceptos. 

Y hoy os quería hablar de las primeras actividades relacionadas con el mundo pre matemático. Como en todos los procesos de aprendizaje, en Montessori no se puede correr. No se compite, no se satura al niño. Se le brinda la oportunidad de disfrutar del aprendizaje a su ritmo proporcionándole el ambiente adecuado. 

Así pues, antes de contar, de calcular, el niño debe preparar su mente lógica, estructurar el pensamiento. Simplemente con actividades que pongan en práctica los sentidos mediante la observación, la manipulación, la reflexión, el juicio y la deducción. 

Os dejamos pues, todas las actividades que hemos hecho (y os enseñaremos las que seguiremos haciendo por Instagram porque estas actividades se pueden ir haciendo siempre, aumentando la dificultad poco a poco o haciendo variaciones). Están extraídas de libros del área matemática, algunos con recortables que acercan a nuestras casas materiales Montessori con gran peso económico. En esta primera etapa matemática, pues, los niños deben desarrollar y afinar capacidades de discriminación visual, clasificación, orden, categorizar… en casi todas hemos intentado trabajr con las manos, esos órganos al servicio de la inteligencia. Aunque en algunas de ellas hemos requerido alguna otra herramienta, siempre intentando que sean lo más adpatables a sus fisionomía. En otras, hemos querido mezclar pedagogías (reggio Emilia y su pedagogía de la luz básicamente) que es lo más maravillosos en todo esto. 

Formas

IMG_3749

IMG_4179

IMG_4429

IMG_4750

Clasificar (por forma, por medida, por tipo, varios criterios…)

IMG_4230

IMG_4347

IMG_4349

 

 

Seleccionar y Orientar

IMG_4172

IMG_4175

IMG_4696

IMG_4702

Gradaciones

IMG_4350

IMG_4662

Simetria

IMG_4235

Colores

IMG_4434

IMG_3268

Esperamos que os hayan gustado y que os sirvan de inspiración si habéis optado por estr camino en el aprendizaje de vuestros hijos.

ART CORNER: UN SALÓN DE ARTE PARA EL NIÑO

En navidades, mi marido me regaló unos cursos preciosos de Red Educativa que he estado haciendo estos meses y con los que estoy aprendiendo y creciendo cada día un poco más. 

Así que desde hace tiempo que os quiero hablar sobre Reggio Emilia. Seguro que habéis escuchado alguna vez este nombre pero… ¿qué es exactamente?

Reggio Emilia es un enfoque, una filosofía, no una pedagogía. Reggio es poesía y nace en Italia inspirándose en el aprendizaje activo en un contexto convulso y con la intención de no repetir determinados patrones. 

IMG_3323

En el enfoque Reggio Emilia se considera al niño una persona con potencialidades ilimitadas capaz de construir su propio aprendizaje. El niño adquiere conocimientos a través del juego y por placer, movido por la curiosidad y la imaginación.

Como en todas las pedagogías o filosofías activas, el adulto tiene un papel muy importante en el proceso de aprendizaje dado que su función consiste en acompañar y guiar al niño y preparar las provocaciones (o ambiente). 

IMG_3419

Una provocación tiene como objetivo que los niños reflexionen y obtengan sus propias conclusiones mediante la presentación de materiales que facilitan la exploración.

El ambiente, o provocación, deviene el tercer maestro, y es esencial ya que un buen ambiente es imprescindible para que el niño sea capaz de construir su propio aprendizaje. Un buen ambiente está planificado, repleto de provocaciones que alimentan las necesidades del niño, pero también se adapta a las necesidades del niño, de manera que puede cambiar o ser modificado, no es invariable, fomenta la independencia y proporciona el tiempo que necesite el niño para aprender, respeta su ritmo de aprendizaje.

Podemos crear estos ambientes en nuestras casas, donde los niños sientan la necesidad de explorar, de aprender. Deben de estar llenos de belleza y poco recargados, ya que se debe priorizar la concentración. 

IMG_4185

Y el rincón/salón de arte, o Atelier, es uno de los espacios imprescindibles en un ambiente Reggio Emilia, donde los niños pueden explotar su creatividad y exponer sus obras de arte libremente a través de materiales reales para que desarrollen su imaginación. En cuanto a las obras creadas por los niños, lo importante no es el resultado sino el proceso. Aun así, es importante tener un espacio donde poder colgar las obras que más relevancia tengan para el niño. 

IMG_3834

El arte permite la expresión más allá de la verbalización y es un espacio donde pueden confluir todos los lenguajes, todas las formas de expresión, los 100 lenguajes del niño, como decía Malaguzzi. Y además, la expresión se hace a través de la acción, de las manos, tan importantes para las pedagogías activas. Por ello, es importante que en este rincón de arte no existan las normas, que los materiales puedan manipularse libremente. Para que el niño explore, se manifieste y cree a su libre albedrío. 

Crear un espacio de arte no es complicado; simplemente es crear un rincón donde haya materiales de arte al alcance de los pequeños. Para responder a la belleza que tanto defiende la filosofía Reggio, podemos disponer los materiales en carritos, cestas, bandejas, botes de cristal…

IMG_3298

En nuestro humilde rincón de arte tenemos material diverso, sobre todo que se manipula con las manos, puesto que con Marco todavía evitamos usar mucho lápices o rotuladores de toda la vida, ya que creemos que la mano es el principal órgano motor ligado a la inteligencia y al aprendizaje directo. 

Nuestros favoritos son los que os mostramos: 

IMG_4186

Dot Markers, Retales, Cola, Washi Tape, Sellos, Pegatinas…

IMG_4187

Crayones gruesos (los más gruesos son un flipe porque pintan en la bañera y en los cristales)

IMG_3837

IMG_4188

Ceras hechas con cera de abeja, Témperas sólidas, Acuarelas, Tampones, BloPens (rotuladores para soplar)

IMG_4189

Pinceles, bastoncillos y esponjas, Tijeras

IMG_4190

Pintura acrílica, tizas y ceras de toda la vida (cajita)

En nuestro carrito también tenemos hojas blancas, cartulinas, la bata para pintar, dibujos, pizarra magnética, material reciclado para crear o usar como recipiente, taburete (que no usamos siempre)… 

Este rincón lo creamos en pleno confinamiento, cuando vimos la necesidad que tenía el peque hacia el crear. Los materiales los teníamos por casa, un poco dispersos y algunos los hemos comprado. Simplemente respondimos a su necesidad, ofreciéndole un espacio donde poder tener experiencias ricas y bellas.

Para nosotros, pues, el confinamiento ha sacado a la luz el sentido artístico de nuestro retoño. Y este sentido artístico nada tiene que ver con la intención estética que exigimos los adultos. Marco crea libremente, de manera natural y relajada. 

IMG_3301

Algo muy importante a la hora de ofrecer experiencias artísticas a los pequeños es que ellos nunca tienen la intención de representar la realidad, sino que emplean el arte como canal para transmitir emociones, mapas mentales o pequeños recuerdos. Poco a poco, hacia los 3 años y medio, y si dejamos que su desarrollo se dé con naturalidad, empezaran a sentir la necesidad de buscar la representación de algo concreto, formas que se acercan un poco más a la realidad que les envuelve. 

La verdad es que es maravillosos como Marco cambia su trazo poco a poco, cómo ha evolucionado de lo redondito a lo puntiagudo, cómo intenta representar elementos que se parecen a lo que quiere representar y cómo busca combinar colores y materiales en sus composiciones.  

IMG_3665

Recordar que algo que no debemos hacer nunca es guiar las obras de nuestros hijos (todos los niños del mundo dibujan una cara antes de los 3 años si le vamos diciendo qué dibujar) y sobre todo, nunca tener intención de aprobar lo que hace, de utilizar frasecillas como “muy bien” o “qué bonito”. Desde Reggio Emilia o Montessori se aborda el arte desde otra perspectiva, buscando valorar el esfuerzo, la concentración, el material o los colores empleados, las líneas…

Y finalmente, os dejo una pequeña reflexión de lo que aporta a los más pequeños disponer de un rincón de arte, usado obviamente, como espacio libre de intervención: 

– Permite que el niño explore lo desconocido en un ambiente seguro.

– Proporciona tiempo, tiempo para el placer.

– Se fomenta la sensibilidad, huyendo de lo que es muy concreto.

– Permite ver las relaciones entre las partes.

– Proporciona flexibilidad, libertad de expresión y huir de los límites habituales. 

–  Enriquece la imaginación pero también la razón.

– Da importancia a la forma pero también al fondo. 

– En una aula permite descubrir las mil formas que aporta cada niño.

IMG_3297

Si os animás a crear vuestro Art Corner y dejáis que vuestros peques creen libremente, estaré encantada de verlo. 

¡Os esperamos en el siguiente post!

LA MÚSICA EN CASA

Cuando empezó todo esto del confinamiento, en casa nos costó mucho arrancar. Más que arrancar, frenar. Íbamos a todo gas, con nuestras cosas en la cabeza. Con unos objetivos. Pero nos hicieron parar. Y estar todos juntos. Los primeros días fueron un poco caos, supongo que como en la mayoría de los casos. Pero poco a poco nos dimos cuenta de que era una oportunidad para crecer, para aprender y para observar(nos). 

Y decidí poner en práctica todo lo que había aprendido en los cursos que he ido haciendo este año. A tomar notas, a reflexionar, a observar a mi hijo. Ya os hablé cómo es de importante el arte de la observación en Montessori. Pero siempre vamos corriendo, aunque no nos lo parezca, y no vemos más allá. Así que siguiendo las pautas que nos marcó Carla (de @earlychildfood) tomé notas sobre lo que hacía mi hijo, cómo lo hacía, con qué materiales lo hacía… y la magia surgió. 

IMG_2309

Marco tiene sentido musical. Quizá, incluso tenga oído absoluto. Nuestro #daddycool ha explorado (y sigue explorando) con el peque la relación que tiene con la música. Yo no lo tenía claro porque siempre he creído que yo no tengo oído… pero mi marido es músico. Sí, tienen una capacidad distinguida para identificar y comprender la relación entre tonos, juntar notas y combinarlos entre sí. Es decir, tienen una facilidad de aprendizaje musical innata. Mágica. 

Esto, en casa, obviamente lo consideramos un regalo, una cualidad con un valor incalculable. Porque tal y como ya apuntó María Montessori, en casa subrayamos la importancia de la música, que “logra abrir las puertas del corazón y a sostener el espíritu”. Pero es bien sabido que el sistema educativo existente (tradicional, si me lo permitís y presente en muchos más hogares de lo que nos pensamos) se ha basado en un método estándar para todos los niños y niñas. No se hace casi ninguna distinción entre un niño y otro dependiendo de sus habilidades, talentos y/o capacidades. Se premia al primero que dibuja una cara, o escribe su nombre, o coje bien el lápiz, o se sabe de memoria el poema de Navidad. Por este motivo, tenemos una sociedad con niños frustrados porque no son buenos, por ejemplo, en matemáticas, y no consideramos que a pesar de que sus destrezas en el área lógico matemática sean las mejores, presentan dotes artísticos y musicales fantásticos, maravillosos e irrepetibles. Es decir, se reprime su capacidad de desarrollar y explotar su potencial y su talento en las artes y en la música.

IMG_0518

Y además, también creemos tener la forma de poner en la mano del pueblo la música, con conciertos en plazas públicas, acercándola a las masas sociales. Una música que carece de educación musical, dando lugar, y pongo las palabras de María Montessori, “a un pueblo de sordos a quienes les es negada la posibilidad del regocijo musical”. Cuando María Montessori hablaba de educación musical no se refería a la música creada para las masas. Se refería a considerarla como una disciplina más, una capacidad más, una inteligencia más, una dote calificativa. 

Así que en casa, siguiendo este período sensible del pequeño, le hemos preparado el ambiente para desarrollar todo su interés por la música. Tiene a su alcance todo tipo de instrumentos y de actividades, que en muchos casos, propone él de hacer y con las que aprende de manera natural, sin forzarlo. 

La música habla un lenguaje que los niños entienden instintivamente. Por ello, darle a nuestros hijos la posibilidad de crecer y aprender rodeados de música es darles un legado invalorable para su desarrollo

IMG_3220

Creemos pues, que la música es un factor educativo indispensable, ya que favorece el impulso de la vida interior y apela a las principales facultades humanas: la voluntad, la sensibilidad, el amor, la inteligencia y la imaginación creadora. Además, estimula el ritmo cerebral, la respiración y la actividad neuronal, facilita el movimiento, permite desarrollar una mayor coordinación y equilibrio, favorece el ritmo, estimula el lenguaje, la memoria y el razonamiento y desarrolla emociones, sentimientos y creatividad.

IMG_1731

Marco escuchó su primera obra musical cuando tenía 5 horas de vida. Sheep may safely graze, de Bach. Y así seguimos durante muchos meses. Porque la percepción auditiva es, seguramente, punto cardinal en la experiencia musical; no en vano es el oído uno de los primeros órganos que se desarrollan. 

IMG_0796

A medida que crecía, empezamos a cantar y a hacer mímica y ritmos y sonidos con todo el cuerpo (manos, pies, boca…). Y cuando se aguantó sentado empezamos a ponerle instrumentos a su alcance. Unos de los instrumentos más indicados para esta edad son los denominados Instrumentos “Orff”, instrumentos de percusión construidos en madera, metal y membrana. Y algunos instrumentos con sonidos definidos como los xilófonos. 

IMG_1493

IMG_2217

 

IMG_4472

IMG_4578

IMG_9028

IMG_7160

IMG_3142

Estos instrumentos permiten que los niños vivan la música de forma manipulativa, activa y experimental. Con ellos el niño participa, interpreta y crea música por él mismo y a través de esta experiencia entrará en contacto con conceptos como el ritmo, la melodía, timbre, intensidad… 

IMG_3707

También, poco a poco, empezamos a ofrecerle experiencias musicales con su propio cuerpo, con canciones donde utilizamos las manos y donde hacemos ritmo con nuestro propio cuerpo. Para ello, nuestro #daddycool nos llevó al Auditori de Barcelona, nos hizo un taller musical en nuestra localidad, y nos propone muchas actividades que integran todas esas actividades con músicas tanto cultas como tradicionales (de diferentes regiones del mundo). Las canciones con danzas y juegos ayudan a profundizar en sus vivencias musicales así como en la comprensión de los fenómenos sonoros y poco a poco se va iniciando en los signos que posteriormente facilitarán la práctica de la notación musical tradicional. 

DSC03134

IMG_1511

 

 

IMG_8551

 

IMG_9256

IMG_9447

IMG_9462

En casa, pues, cantamos, bailamos, escuchamos obras de todo tipo, leemos acerca de las obras, hablamos de instrumentos, de compositores, simulamos conciertos y tocamos instrumentos sin ningún prejuicio (con el peligro que representa para estos) de los que disponemos en casa: violín, piano, saxos, flauta travesera, acordeón, guitarras, ukeleles, percusión determinada e indeterminada, flautas de pico… 

Esto es un punto muy a favor nuestro: tener un músico en casa. Y no un músico cualquiera. Es especialista de música en la escuela que va a empezar a ir Marco en septiembre. Y tener un especialista en la etapa de infantil es un regalo de los más grandes. Porque la música se enseña desde las entrañas, queriéndola, valorándola, sintiéndola. Y alejando a los más pequeños de esos “conciertos en las plazas públicas” que decía Montessori para acercarlos a una profunda educación musical. 

Yo, poco a poco, he ido convenciendo a mi marido que trabaje la música con Marco siguiendo los principios montessorianos. Él es músico y María Montessori no, por ello hemos creado un mix de pedagogías que no me puede gustar más. Al estar solo con el peque, las actividades cobran magia. Lo único que ha modificado es saltarse pasos “no musicales” y ser un poco más científico en el método. Porque Marco tiene una recepción increíble, porque la música le atrae como a mí las pirámides y porque David hace luz con la música. 

Así que, a partir de aquí, David os explica cómo hemos trabajado la música en casa en una primera etapa (0-2). Con Marco, hemos “seguido al niño” de manera estricta. Observándolo mucho y  siguiendo y actuando sobre los aprendizajes musicales “a demanda”. Y siempre señalando hacia el instrumento más importante por las cualidades que aporta a la armonía y a las sonoridades: el piano (en Montessori hay las campanas blancas y plateadas pero el lenguaje es el mismo).

IMG_0423

IMG_2759

IMG_6888

IMG_6991

La metodología que hemos usado, obviamente, está basada en la experimentación, la manipulación: aprender música haciendo música.  Acción, acción y acción: Marco escucha, canta, imita, observa, reproduce, responde, improvisa, crea, apareja, danza y de vez en cuando plasma alguna actividad gráficamente. 

Tenemos muy claro que la vivencia de la música no puede tener como único contenido el trabajo o la actividad en una hoja. Marco, desde que nació escucha, manipula y poco a poco va deduciendo todo y en todos los ámbitos, siempre, observando en qué momento madurativo se encuentra nuestro hijo, sin forzar. 

En esta primera etapa, pues, básicamente hemos hecho juegos de falda, saltar, picar, movernos y bailar. Hemos creado pequeños espacios musicales que han permitido el juego solitario y asociativo de materiales (juegos y materiales sonoros e instrumentos de percusión). Durante estos años (y por muchos) centramos la atención en la actividad con juegos motores a través de la música.

DSC02380

IMG_0060

 

Sobre las cualidades de los sonidos hemos puesto mucha atención en las impresiones que recibe Marco según los sonidos (Marco tiene un oído finísimo), especialmente en lo que respecta al timbre. Trabajamos los contrastes de intensidad, la exploración sonora imprevisible e irregular. Elementos musicales desorganizados, sin significado estructural ni expresivo. Si que nos hemos centrado (David básicamente) en los cambios evidentes en las alturas sonoras, que por cierto se le dan muy bien a Marco, el timbre de los instrumentos (y la asociación con la imagen y su nombre, pero siempre primero respetamos el aprendizaje del timbre) y posteriormente la estructura de algunas canciones de manera vivencial y divertida.

IMG_2962

Sobre el movimiento, hemos potenciado a través de la música el caminar, saltar con dos pies, con uno, correr, intentar seguir el compás de la música con cierta flexibilidad y gracia en la expresión de todos sus movimientos. La sincronización motora con la música, moviéndose, picando de manos… es el más divertido de los juegos que hemos realizado con Marco. Si tenéis ocasión, pasad por el blog del aula de música de David y probad de hacer este tipo de actividades (Dalcroze).

La memorización, la interpretación y la entonación de las canciones también ha sido una parte fuerte en el trabajo de la familia. Hemos disfrutado muchísimo siguiendo como Marco va descubriendo las posibilidades ritmicomusicales de las palabra y como disfruta ya componiendo sus propias canciones sobre un mismo tema que le interesa.

Hemos jugado a relacionar mentalmente la música con el movimiento de manera que a él ha llegado de forma sensorial. 

Sobre instrumentos hemos comenzado, fielmente a las pedagogías musicales, con sonidos del entorno y sonidos que puede realizar él mismo con el cuerpo (hay que decir que Marco es un experto en silbar a sus 3 años), para pasar a todo el resto de instrumentos siguiendo siempre la pedagogía del juego y la diversión: pequeña percusión indeterminada y determinada, aunque David pone en sus manos cualquier instrumento musical para que juegue (bueno, el saxo creo que no se lo deja demasiado).

IMG_9133

Jugamos a reproducir estructuras rítmicas sencillas y a reconocer fragmentos de música a través del ritmo con instrumentos indeterminados. 

Lo más importante del trabajo con Marco es que David puede hacer juegos como tocar un acorde complicado y contrastarlo con otro similar pero con alguna pequeña diferencia y jugar a que Marco simplemente descubra que son diferentes. El nombre de los elementos, las cualidades y su ejecución en un instrumento (hay que decir que en ningún caso queremos provocar que Marco sea músico, sino que queremos aprovechar todas las oportunidades que nos brinda la música y que aprenda a respetarla en todos sus ambientes y aspectos), ya vendrán más adelante, pues entonces y solo entonces, cuando Marco haya realizado todo el trabajo de fondo que le estamos brindando y si él quiere, aprenderá toda la complicada abstracción que le estamos ofreciendo a través del juego y la diversión en familia. 

Y aquí hasta hoy, que ya ha sido mucho. La semana que viene os postearé la siguiente parte con actividades de prelenguaje musical. Para mí, una delícia de post (porque los he visto trabajar y es bello, bello). 

¡Os esperamos! ¡Es un post que nos hace mucha ilusión porque hemos participado toda la familia! 

pd: gracias David por tu asesoramiento en todo momento. Te quiero

ACTIVIDADES DE PRIMAVERA INSPIRADAS EN REGGIO-MONTESSORI

Aunque el calor acecha con ganas, no debemos olvidar que todavía estamos en primavera y es una de las estaciones que más nos brinda para hacer actividades que nos localizan en el tiempo, en los ciclos, en los cambios. 

El año pasado, para estas fechas, publiqué el post de aquí. Actividades inspiradas en Waldorf y Montessori para peques de entre 15 y 24 meses aproximadamente para empezar a practicar con la vida práctica, sumergirse en la motricidad fina, apreciar el arte, discriminar colores…

Pero los peques crecen y sus necesidades también. Me encanta ver los cambios que ha hecho Marco, lo que pide, los aprendizajes que lleva a cabo, las propuestas que reclama y la concentración que poco a poco va adquiriendo y que me fascina (porque lo veía imposible, la verdad).

IMG_2418

De todas formas, seguimos aprendiendo jugando. Porque según Montessori todos los niños aprenden por medio del juego: porque el juego es el trabajo de los niños. Como siempre os digo, como padres debemos estimular su interés y nunca, jamás, forzarlos a aprender algo. Ellos tiene un poder especial para aprender, sencillamente, observando, y absorben todo lo que les ponemos delante.

Así que os traemos actividades inspiradas, principalmente, en la pedagogía Reggio Emilia (nuestro #daddycool me regaló un curso preciso sobre esta pedagogía y estoy in love) pero también mantenemos la línea montessoriana, con actividades que hemos visto en libros tan maravillosos como el de Bei Muñoz, Montessorízate (libro de actividades) o el de Zazu Navarro, 365 actividades para jugar sin pantallas. Si no los tenéis, apuntad porque son pura belleza y inspiración. 

Y si algo he aprendido con los métodos de las pedagogías alternativas es que a veces, queremos que nuestros hijos hagan más de lo que su maduración les permite, así que os aconsejo observarlos y hacer propuestas adaptadas a su momento. 

No me enrollo más, ¡vamos allá!

Plantar porotos, hacer un huerto (botánica, vida práctica): Esta primavera confinados en casa ha sido una buena oportunidad para observar la naturaleza con detenimiento. Sembrar semillas, ver crecer los primeros tallos y cómo florecen después es casi mágico. Empezamos con judías, lentejas y garbanzos y acabamos haciendo un huertito. Algo que me fascina de la pedagogía Reggio Emilia es que la belleza adquiere un papel relevante en las provocaciones. Así que plantamos los porotos en una ventana, con una bolsa transporta papeles. También hicimos algunos en vasos, en plantel, en macetas… y así conseguimos tener cultivo de guisantes, rabanitos, calabacines, tomates, pimiento, fresas y acelgas. E hicimos el huerto de Marco. 

IMG_2424

IMG_2658

IMG_2680

Y hemos hablado de las diferentes semillas, de la tierra que se debe poner, del agua, de los tallos, de cómo cuidar cada planta, de sus flores… Simplemente tomando consciencia de su cuidado, de lo que nos puede brindar una semilla. 

Y así, cualquier aprendizaje manipulativo deviene significativo. 

Ciclo de vida y partes de la planta (botánica, lenguaje): Las actividades de botánica pueden ir acompañadas de otros aprendizajes manipulativos para que se perpetúen. Así que hemos trabajado la nomenclatura del ciclo de vida de las plantas y las propias partes de las plantas. Para ellos, hemos usado las tarjetas de tres partes Montessori y como complemento, las miniaturas del ciclo de las planta de Safari Ltd. 

IMG_2425

Y hemos buscado por el jardín las diferentes partes que componen una planta: tallo, hojas y flores y las hemos clasificado en diferentes vasos. 

 

Suncatcher (arte): Preciosa actividad para trabajar la coordinación mano-ojo, el sentido estético, motricidad fina, la belleza, la luz. 

IMG_3419

Usamos un viejo bastidor que teníamos por casa y después de haber recogido y prensado las flores creamos nuestro “cazador de luz”. En él hay la vegetación de esta estación, con colores vivos, armónicos. El contacto con la naturaleza conecta a los más pequeños con su esencia. Montessori pensaba que los árboles, la naturaleza hablaba al alma y que no había nada en el mundo que pudiera dar lo que la naturaleza es capaz de dar. 

IMG_3420

Al peque estas actividades le apasionan: cortar, pegar, usar la silicona… 

Naturaleza en la mesa de luz (botánica, sensorial): No es casualidad que en el enfoque Reggio, naturaleza y luz estén en sincronía en las provocaciones. Los tesoros que recogemos de la naturaleza sirven para una asombrante actividad. Y la mesa de luz nos permite observar esta naturaleza desde un nuevo prisma multinsensorial. 

En la mesa de luz hemos realizado dos actividades, a cada cual más bella.

– Flores, espigas, florecillas frescas, hojas, aromáticas… plastificadas. Una propuesta que representa un mini mundo cercano al niño. Le dejamos lupas y caleidoscopio para observar las flores y sus detalles y estuvo un buen rato distraído.

IMG_3508

IMG_3509

IMG_3511

– Bandeja sensorial con gelatina: activar los sentidos. Olfato, gusto, tacto, vista. Os la contamos en nuestro perfil de Instagram con más detalle. La verdad es que es relajante e inquietante a la vez.  

Cromatismos naturales (botánica, lenguaje, sensorial): Salir al aire libre. Algo tan valioso en estos tiempos de pandemia. Observar la realidad de los entornos naturales: oler, sentir, tocar, movernos, experimentar… y simplemente, observar la gama cromática que nos brinda la madre tierra. 

Para ello hemos pintado un clasificador de colores y hemos trabajado conceptos como claro, oscuro. 

IMG_3525

Decoraciones con flores y plantas frescas (arte, matemáticas): Hacer alguna bonitez también es bien. Preparamos un atelier de arcilla blanca y participamos todos. El objetivo principal de un atelier es que el niño sea protagonista de su aprendizaje, que a través de los materiales, del espacio y de la organización sea capaz de experimentar y llegar al conocimiento de todo lo que nos ofrece.

l papel del adulto consiste en pensar los materiales y en disponerlos de modo que sean sugerentes a los niños y con los que ellos puedan llegar a aprendizajes más profundos: texturas, temperaturas, volúmenes, formas, alturas… las posibilidades son infinitas.

IMG_3528

Los materiales que se usan para un atelier de barro son básicamente elementos naturales y algunas herramientas para el modelaje. 

Observando los bichos (zoología, lenguaje): la verdad es que en relación con los bichos podría hacer un post a parte… llevamos muchos, muchos días jugando a cualquier cosa con las miniaturas de bichos de Safari Ltd…. y con algún que otro real. 

 

 

Hemos trabajado con las tarjetas de tres partes, les hemos hecho casitas, hemos visto sus huellas en plastelina, los hemos observado en el observador de bichos, los hemos bañado, les hemos dado de comer… Y es que primavera es igual a “el gran libro de los bichos”. 

El pase de diapositivas requiere JavaScript.

 

Y hasta aquí, que no queremos avasallar con tanta actividad… hay alguna más pero si nos seguís por Instagram os la iremos enseñando en solitario. ¡Os esperamos!

… Y EL UNIVERSO SE ABRIÓ EN MI CABEZA

Una noche observé con mucho detalle la luna y logré percibir de qué manera el Sol iluminaba su perfil. Fue entonces cuando el cielo dejó de ser plano y el universo se abrió en mi cabeza. 

Hoy os voy a contar una historia extraordinaria: la de las estrellas y la de los planetas. La de la creación del Universo y la de nuestra Tierra… así empieza la primera gran lección Montessori. Y así empecé, hace ya casi un año, a hablar sobre el universo con mi pequeño. Siempre ha mirado hacia arriba, hacia el cielo. Mucho antes de hablar ya intentaba tocar las nubes. 

Así que cuando hace un par de meses me dijo que quería hacer cosas de alienígenas, cohetes y planetas vi la puerta abierta para entrar. Me daba permiso para crear y aprender juntos. 

Algo que me planteo mucho antes de empezar a hacer “actividades” y “manualidades” con mi hijo (y que no sean, obviamente propuestas a destajo) me replanteo, dentro de mi cabeza, cómo quiero que sea ese aprendizaje: rigurosidad científica, herramientas, arte, música, lenguaje, actividad física, matemáticas, vida práctica, vocabulario, lógica, literatura, sensorial… Porque de eso tratan los proyectos, sobretodo de carácter montessoriano. De ir de lo abstracto a lo concreto, de construir conexiones horizontales. 

El primer día escuchamos música. En casa no puede faltar, como os debéis imaginar… (un día, cuando mi marido quiera hacer un post conjunto hablaremos de cómo hacemos música en casa). Y creemos que representa uno de los puentes más brutales para entrar en un contexto. 

Nuestro #daddycool escogió The Planets op. 32, la obra más conocida del compositor inglés Gustav Holst. Es una maravillosa suite de siete movimientos a cada uno de los cuales Holst le dio el nombre de un planeta. 

Después de escuchar un buen rato la obra, y de manera conjunta, seguimos con el mundo sensorial con una bandeja del espacio exterior: había planetas, cohete y estrellas. Usar el sentido del oído y del tacto (la mano es la herramienta más importante para el aprendizaje y el órgano ejecutivo de la inteligencia) es algo que hemos trabajado desde los primeros meses de marco y creemos que es su medio para aprender. 

Después de estar un buen rato tocando, moviendo, haciendo sonidos… aprovechamos para tocar el área del lenguaje: hicimos unas tarjetas al estilo de las clásicas tarjetas de 3 partes Montessori donde relacionábamos planeta con palabra/imagen. Y aunque Marco no lee, obviamente, aprovechamos para ver las letras un poco más de cerca (usamos cromatismo Montessori), ver qué letras eran las inciales de cada planeta y aprendimos vocabulario nuevo también a partir de los 3 tiempos. 

IMG_2521

IMG_2523

IMG_2525

Cuando tuvimos todos los planetas identificados, él propuso trabajar las matemáticas. El área de matemáticas es muy flexible y siempre digo que los pequeños pueden aprender muy temprano conceptos matemáticos sin que estén estrictamente haciendo matemáticas. Quiso comparar planetas, grandes-pequeños, lejos-cerca… 

En su cielo más “cercano”, Marco veía estrellas. Mi madre me enseñó a mirar el cielo cuando era pequeña y es algo que siempre me ha fascinado. Grupos de estrellas que se unen como representación de un mito griego, dioses, belleza, fuego, discordia… así que en mi pequeña familia que he creado es algo que hemos hecho de manera natural. Al final, a mi marido le fascinaron tanto las constelaciones que se volvió un aficionado. Y ahora, nuestro pequeño es un “avanzado” observador del cielo. Como siempre que introducimos vocabulario nuevo, creamos nuestras tarjetas Montessori. El aprendizaje en tres tiempos es clave para perpetuar ese nuevo vocabulario. 

IMG_2679

También las vimos en directo y después creamos un proyector de constelaciones casero. Mientras las veíamos en el techo de la habitación, yo leía sus mitos. Hablamos de monstruos, de héroes, de gigantes, de ninfas… 

Y trabajamos la pinza (pieza clave para cuando empiecen a escribir) creando constelaciones en un cartón con unas chinchetas. Trabajo fino y máximo. Concentración, conteo, precisión… Y algo diferente a lo que se hace a las escuelas de infantil para trabajar este tipo de habilidad.  

Pero el universo no sólo está compuesto de planetas y estrellas. También tiene nebulosas, galaxias, lunas… así que hicimos varias propuestas del área de arte para descubrirlo. E hicimos una nebulosa en un bote. Marco también hizo una nebulosa en una hoja con las pinturas fluorescentes pero duró un suspiro… Tanto el proceso como el resultado es preciosísimo. Simplemente debemos añadir algodón, pintura agua y purpurina y hacer capas de colores. 

¡También hicimos galaxias con cola blanca y colorante! Y todavía no las hemos usado en la mesa de luz…

IMG_2656

Y pintamos con diferentes técnicas una Tierra (pintamos con algodones), una Luna (pintamos con papel de aluminio) y sus fases (cartulinas y acrílicas). Porque el universo contiene ciclos mágicos. Hablamos de las fases de la luna, de lo que provocan estas fases en la Tierra y en la vida de los humanos y observamos la luna con unos prismáticos. 

Del arte, pasamos a la literatura. Y nos enganchamos a un libro mágico que tenemo en casa: Infinito, de Mariona Cabassa y Soledad Romero, habla sobre todas las cosas que existen en el universo, de sus transformaciones.

Las actividades de vida práctica son mis favoritas. Porque sienten que pertenecen, que contribuyen y que son iguales a sus progenitores.  Usar herramientas de cocina reales en un ambiente preparado les gusta mucho, se sienten importantes, útiles, y esto ayuda con su autoestima, autonomía y fortalecen destrezas de motricidad fina. Así que preparar una merienda al estilo espacio fue un éxito. 

IMG_2647

Para recopilar todas las ideas de las que habíamos hablado y trabajado, quise hacer una propuesta a modo de síntesis aislando una nueva dificultad: las gradaciones de color de la caja 3 Montessori. En esta última propuesta, trabajamos de nuevo las nombres de los planetas, esta vez con el abecedario móvil que Marco manipula la mar de bien, ordenamos tamaños… Y buscamos los colores de cada planeta con las tarjetas de la caja de color número 3. Esta caja tiene 9 grupos de colores en forma de degradación, es decir, 9 colores diferentes (rojo, rosa, morado, azul, amarillo, naranja, negro, marrón y verde) en diferentes tonos de más oscuro a más claro. Y buscamos qué colores y qué grados de color hay en cada planeta, trabajando el orden, la gradación, la concentración, el sentido de la estética y la creatividad. 

IMG_2885

IMG_2887

IMG_2883

Como final de fiesta, hicimos un paseo por la luna. Todo muy estelar, fluorescente, oscuro y mágico. Saltos sobre las pisadas lunares, lateralidad y muchas risas. ya os la contamos en nuestro perfil de Instagram, como casi todas las otras propuestas y que podéis ver aquí.  

Así cerramos una preciosa actividad completa donde las haya.

Por último, deciros que si lleváis a cabo actividades de este tipo simplemente sigáis al niño: cero expectativas, rol de adulto observador y dejarlo experimentar a sus anchas. Nunca, guiar, obligar o negar.

LECTOESCRITURA (PARTE I)

Por fin tengo un poco de estabilidad en mis estudios opositores y puedo dedicarme, un día a la semana, a escribir por aquí, algo que necesito como el agua de mayo.

Y hoy me he atrevido a hablar de lectoescritura. Era algo que tenía muchísimas ganas de hacer. Pero como no había llegado el momento en casa, me he ido formando hasta que las letras han tocado la puerta. Lo he titulado “parte I” porque quiero ir haciendo diferentes episodios relacionados con el tema y con cada etapa evolutiva de Marco. 

IMG_1177

Parece una tontería… pero como en todo lo que hago relacionado con la educación de mi hijo, me gusta analizarlo, contrastarlo, formarme y decidir lo que creo que es mejor en nuestro caso. Nunca he pretendido criticar otros sistemas, simplemente busco la vía que mejor se adapta a nuestra situación y la que creo que es más respetuosa para el peque. 

Así que allá voy. Hace mucho leí un artículo sobre el desarrollo óseo. La publicación partía de unas radiografías de las manos de etapas diferentes de la infancia-adolescencia. La mano del individuo más joven (3 años), mostraba que los huesecillos de la muñeca y las articulaciones de los dedos no estaban cerradas. En otra imagen, una mano de un individuo de unos 7 años (que es cuando están realmente interesados por escribir y leer), se veía que empezaban a verse bastante unidos. Y después había manos de adolescentes, algunas más deformadas y otras más definidas. 

La cuestión era clara: ¿cómo puede ser que nos empeñemos en dar ceras/lápices constantemente a los 2 años (o antes) o pedir que escriban con 3-4 años?

IMG_2694

No soy súper experta, pero defiendo la pedagogía Montessori en casa y por lo que se refiere a lectoescritura no puedo estar más de acuerdo: antes de escribir hay que sentir. La mano es el instrumento de la mente. ⁣

Así que en el proceso de aprendizaje de la lectoescritura, antes de escribir las grafías, es necesario hacerlas tangibles, sentirlas, tocarlas y haber experimentado con los diferentes conceptos de un modo sensorial. ⁣Solo así adquirirán un significado en la mente del niño o de la niña. ⁣Y lo conseguiran mediante un ambiente preparado. 

En casa, pues, antes que meternos de lleno en explicar cómo se coge un lápiz y cómo se escriben las grafías, vamos proponiendo otras actividades que acompañan el desarrollo natural de nuestro pequeño. Así que planteamos juegos como: rasgar papel, jugar con plasti, insertar objetos por ranuras, cortar con tijeras, usar el punzón, pintar con los dedos… 

IMG_2350

IMG_2364

IMG_2677

IMG_3198

Y obviamente, son actividades que desde muy temprana edad de Marco iniciamos con el lenguaje oral. Las actividades del lenguaje oral son asimismo los cimientos indispensables para una exploración futura de la escritura. En efecto, el niño debe haber elaborado y estructurado su lenguaje oral antes de abordar con soltura el lenguaje escrito. Estas actividades buscan preparar al niño para la autonomía y la creatividad en la escritura, y también para la fluidez y la comprensión lectora.

Para enriquecer el vocabulario, pues, hemos trabajado con objetos del entorno (lecciones en 3 tiempos), tarjetas de imágenes (cuerda de la belleza), historietas, canciones, cuentos… Si os interesa mucho este tema, puedo hacer un post a parte. 

IMG_2685

IMG_2962

IMG_2278

IMG_2346

Y si creéis que esta etapa tan inicial ya ha pasado, cosa que os recomendaría alargar el máximo posible, y realmente vuestros hij@s necesitan saber las letras, podéis ir ofreciendo al niño ocasiones múltiples y concretas para explorar la lengua escrita, equipándolo para una conquista de la lectura.

La pedagogía Montessori ofrece al niño las claves para la escritura y la lectura en forma de numerosas actividades que permiten preparar de manera separada las aptitudes indispensables para dominar la escritura. El niño explorará durante estas actividades aquello que necesita para reconocer y utilizar los símbolos. 

Así pues, se le invita a explorar, de manera sensorial, los elementos constitutivos y la organización de la lengua escrita: 

  • los sonidos, las letras y la formación de las palabras, con, por ejemplo, la caja de sonidos. 
  • actividades de Vida práctica y sensoriales, imprescindibles, como pelar huevos, pelar guisantes, pintar uñas, tender la ropa…  
  • el trabajo, con, por ejemplo, las letras rugosas, que familiariza completamente al niño, mediante el tacto, con la forma de cada letra y la trayectoria para trazarla. Le permite asociar el símbolo con el sonido. También le ayuda a interiorizar el gesto para formar cada letra. 
  • el material de las letras móviles permite al niño componer palabras, luego frases, sin tener que preocuparse por la ortografía, de una manera puramente fonética. El objetivo aquí es la asimilación del rol simbólico de las letras y su uso para componer la escritura.

    CAIXA SONS

LLETRES RUGOSES

IMG_2883

La originalidad de las actividades de escritura y de lectura Montessori reside ante todo en apelar al mismo tiempo al tacto, a la manipulación de objetos y a la reflexión del niño

DSC02229

IMG_0642

IMG_1011

IMG_1171

Y sobretodo, tener en cuenta que obligar/incentivar la escritura en infantil no es un buen camino. No hay prisa, es un proceso natural, si surge interés se acompaña, si no ya habrá tiempo. 

MINI PROYECTO DE CONFINAMIENTO: LA PREHISTORIA

Hoy hemos visto la película de El viaje de Arlo. Y me ha parecido una forma preciosa de dar por acabado nuestro pequeño proyecto de la Prehistoria que empezamos cuando nos quedamos encerrados en casa. Y de volver por aquí. 

Para el cumpleaños de Marco, en febrero, le regalamos el carné de ministro del Ministerio de la Infancia de La Habitación de Jana. A Carla la sigo desde que empecé a querer ser madre y sus cursos me tenían enamorada. Quería tener un hijo un poco mayor para poderlos llevar a cabo y alucinar como realmente lo estamos haciendo ahora que ha llegado el momento. 

Earlychildfood es una escuela de formación online de pedagogía Montessori y disciplina positiva. Se imparten cursos preciosos con un valor incalculable con la intención de dar el papel que se merece la infancia, desde una perspectiva consciente y respetuosa. 

Y empezamos por los cursos de historia y arte. Y no porque yo quisiera (que con lo de la arqueología algo habré influenciado) sino porque el peque empezó a preguntar cosas sobre fósiles (temática de su fiesta), dinosaurios y arqueólogos. Y abrí la caja de Pandora. Empecé a tirar del hilo y Marco se enganchó. 

IMG_1384

Porque para sintonizar con nuestros pequeños y responder a sus necesidades, nos servirán como guía la observación, la intuición, la empatía, y la escucha activa. Así que poco a poco fuimos contando historias, viendo películas (Tadeo Jones ha sido un éxito bestial) y presentando materiales. Siempre prestando atención a los estados emocionales, afectivos, motrices, sensoriales y verbales de nuestro hijo e intentando responder a ellos adecuadamente. 

Sin obligarle. Ha habido días que no hemos tocado nada y ha habido días que hemos hecho actividades prehistóricas sin parar. Y así, tal y como dijo María Montessori mi marido y yo hemos intentado darle lo necesario para que nuestro hijo pueda desenvolverse por él mismo. Intentando alcanzar el límite perfecto, ese umbral de la intervención. 

Y dejando que explore y que reciba libremente. Nuestra intención, igual que con otros mini proyectos que estamos haciendo estos días, no es que aprenda todo el temario de la Prehistoria. Sino que creemos que la exploración libre le permitirá comprender conceptos que son complejos de explicar y le permitirá descubrir otras maneras de hacer las cosas. Y así, poco a poco, su cerebro irá haciendo el paso de lo concreto a lo abstracto. 

Y Carla, con sus cursos pretende convertirse en facilitadora, creando un ambiente cálido, acogedor y sin juicios. Y así, hemos jugado todos. 

IMG_2003

IMG_2008

Mi profesión de arqueóloga, me empujó a montarle un espacio arqueológico en el jardín (que ya lo hicimos el verano pasado y lo hemos repetido más veces este confinamiento). Encontramos fósiles, los limpiamos y los reconstruimos en forma de collar prehistórico (pasta de sal y acrílicas). 

IMG_2010

IMG_2081

Y así, empezamos a hablar de los museos y de lo que había en ellos (restos encontrados por arqueólogos), haciendo la maqueta del Museo Británico. Y desde aquí, abrimos sus puertas para observar diferentes civilizaciones, principalmente a través del arte.

Porque el arte y sus espacios de exhibición deben ser parte de la vida cotidiana de los niños. Para ello, plantear actividades donde el niño se exponga sensorialmente son un buen comienzo. Y que observe, que observe con atención, analice, conozca y absorba los estímulos visuales con sentido estético. Así que hicimos un librito con imágenes reales de la Prehistoria: pinturas rupestres, construcciones megalíticas, herramientas, pieles, casas… 

IMG_2093

IMG_3154

Y nos pusimos a pintar nuestra cueva, vestidos de pieles mediante. Usamos pigmentos naturales (carbón, pimentón dulce, canela…) y nuestro cuerpo y palos para hacer formas. María Montessori, en la etapa 0-6, defiende que el niño trabaje con sus manos, que coja destreza con sus dedos y así en la siguiente etapa, la de escribir, no presentará dificultades. 

IMG_2096

IMG_2097

IMG_2100

Para acabar las actividades, Carla nos proponía hacer instrumentos prehistóricos. Y nuestro #daddycool empezó a buscar y a crear. E hizo unos instrumentos alucinantes junto con el peque. Y nos grabamos. Así que mejor unas imágenes que mil palabras para que veáis cómo de bien nos lo pasamos en nuestra cueva prehistórica. 

Ha sido un primer contacto con La Habitación de Jana alucinante. En Instagram os iremos enseñando cositas de los cursos de Educar para la Paz que estamos haciendo simultáneamente y la semana que viene os esperamos al BLOG con un nuevo post. 

Teníamos muchísimas ganas de volver.